Después de muchos rumores, llegó el primer día de la transición hacia los procesadores propios por parte de Apple. Y qué mejor forma de comenzarla que presentando su primer Apple Silicon, el M1. El nuevo procesador es una cosa bárbara, pues cuenta con el mayor rendimiento por vatio de la industria, y es el primer procesador de escritorio en fabricarse en un proceso de 5 nanómetros. Como veis, para comenzar, buenos datos.
M1: llega la revolución
El nuevo procesador M1 tiene ocho núcleos, donde cuatro de ellos son de alto rendimiento y otros cuatro de bajo rendimiento. Lo realmente interesante de este nuevo chip es que cuenta con mayor rendimiento en su CPU y con un consumo muchísimo menor que su predecesor. En cuanto su GPU, cuenta también con 8 núcleos, gracias a esto, se promete el mismo rendimiento que si nuestro Mac tuviera una gráfica, pero también respetando el consumo. Esta GPU es la más potente del mercado.
Como era de esperar, este procesador M1 también cuenta con el Neural Engine presente en los chips que empiezan por A desde el A11 Bionic. Con 16 núcleos se procesaran grandes cantidades de información gracias al aprendizaje automático. Esto en apps como Final Cut revolucionará la manera en la que usamos este tipo de apps.
Esto es a grandes rasgos el M1 que, además, ha sido creado y optimizado para que de lo mejor de si con macOS Big Sur, actualización que se lanzará el próximo 12 de noviembre tras una larga espera.