Se podría decir que siempre hemos tenido la necesidad de guardar nuestras vivencias, conocimientos y proyectos. Los métodos han ido evolucionando hasta el punto que ahora disponemos de muchos medios, pero hoy te voy a hablar del que pienso que puede llegar a ser uno de los más importantes de los últimos tiempos: la impresión en 3D en tu propia casa.

Una impresora 3D en casa

Hasta hace pocos días mi opinión personal era que una impresora 3D en casa no llegaría a tener éxito y que este tipo de tecnología estaba destinada a entornos más profesionales. Nada más lejos de la realidad. El motivo de mi cambio de parecer llegó por sorpresa en casa de mi hermano, acababa de comprar una impresora 3D Bq PRUSA i3. Venía desmontada totalmente, así que manos a la obra y pieza a pieza la impresora fue cogiendo cuerpo.

La primera impresión no es lo que cuenta

No había tenido la oportunidad de tener contacto con un dispositivo de estas características con anterioridad, y claro, la primera vez me llamó bastante la atención. Tengo que decir que habiendo visto impresoras de todo tipo, mi primera impresión al verla fue negativa al ser más aparatosa que una impresora convencional, debido a la colocación de los ejes que soportan el extrusor (cabezal) y al espacio necesario para maniobrar y dar forma al diseño elegido sobre la bandeja que incorpora. Esto puede resultar un handicap pero uno se acostumbra a ello rápidamente y a día de hoy su forma me parece más curiosa.

¿Cómo funciona una impresora 3D?

Se podría decir que el funcionamiento es muy similar al de una impresora de inyección de tinta con la diferencia de que su cabezal va a reproducir un objeto real, con la anchura, largura y profundidad que se establezca previamente. Lógicamente para ello hay que utilizar una aplicación para poder cargar los diseños 3D en el ordenador y transmitirlos a la impresora, un software que cumple perfectamente con el cometido es Repetier Host compatible con la mayoría de impresoras 3D del mercado. El cartucho de tinta en este caso es sustituido por una bobina de filamento plástico que se fundirá a 200ºC, pudiendo encontrar en el mercado de diferentes colores e incluso algunas compuestas con partículas que imitan la madera.

¿Necesitas algo? Imprímelo tú mismo

Y es que este tipo de impresión pienso que puede cambiar nuestros hábitos. Imagínate por ejemplo que necesitas una carcasa para el móvil, vas a tener la oportunidad de descargarte el modelo que te guste e imprimirlo directamente en tu propia casa. Aquí te dejo un video de muestra para que veas el funcionamiento de la impresora Bq PRUSA i3:

[youtube=http://youtu.be/rMaXFsV9iSg]

Mis conclusiones

Tengo que destacar que encuentro muy interesante el hecho de poder crear un objeto desde cero en tu propia casa, pasando desde el diseño inicial hasta la producción final, aunque el precio de esta impresora fijado en 499,90 euros puede hacer que no sea accesible para todo el mundo pero considero que no es un precio excesivamente caro para este tipo de equipos.

También me genera ciertas dudas de cómo van a reaccionar otras empresas respecto a esta situación, ya que puede resultar una disminución de sus ventas en caso de que se estandarice este tipo de impresoras, debido a que cualquier persona que tenga una puede ser un potencial competidor. Y tú ¿qué opinas de esto?. Espero tus comentarios. Un saludo y hasta el próximo artículo.